NIGERIA (viaje de Cooperación Internacional)

Viaje a Nigeria ( del 7 al 15 de octubre del 2016)

Capital: Abuya

Moneda: Naira (1€ = 230 a 507 Nairas)

 

ÍNDICE:

• Preparativos
• 7- octubre- 2016 Segovia-Madrid- Casablanca
• 8- octubre- 2016 Casablanca- Lagos- Eruwa
• 9-13 octubre- 2016 Nuestra misión en Eruwa
• 14- octubre- 2016 Eruwa- Lagos
• 15- octubre- 2016 Lagos- Casablanca- Madrid
• Consejos

PREPARATIVOS

• Visado: el Visado de Nigeria se debe sacar en la Embajada de Nigeria en Madrid, previa preparación de la documentación: certificado de que actualmente estás trabajando firmado por tu responsable, certificado de tu banco demostrando que eres solvente (que tienes al menos 2.000€), papel de vuelos de avión, carta de invitación desde Nigeria, dos fotos de pasaporte, rellenar el formularios que encuentras en la web de la embajada, imprimirlo y pagar la tasa de 107€, resguardo de dicho pago. En los papeles que demuestran el pago te aparece una fecha, dicho día tendrás que ir a la Embajada a presentar toda la documentación. Son los lunes, miércoles y viernes de 13,30 a 15,30. Una vez presentada la documentación debes volver a la semana en los días y horario explicado previamente a recogerlo, previo pago de 50€ (Visado- 157€)
• Acude al Centro de Vacunación que te corresponda, lleva tu cartilla vacunacional y que te hagan el estudio de las que necesitas. Yo tengo puestas muchísimas y aun así necesité la de la poliomelitis inyectada y la oral de la fiebre tifoidea.
• Imprescindible la profilaxis de la Malaria: Malarone ®, una diaria. Empezar un día antes del viaje, durante todo el viaje y 7 días tras volver. No olvides la mosquitera para dormir y el repelente (Relec ® o Goibi ®).
• Recoger la profilaxis del VIH en el Servicio de Farmacología del hospital por si nos pincháramos con material quirúrgico infectado.
• Compra de los vuelos (Madrid- Casablanca- Lagos 470€)
• Relación constante con el responsable de la misión en Nigeria y con el resto de compañeros sanitarios de la misión para organizar el material quirúrgico.

7-octubre – 2016 Segovia- Madrid- Casablanca

Tras salir de guardia dediqué la mañana a ultimar la mochila, en este tipo de viajes todo lo personal va en la mochila de mano, ya que usamos la facturación para el material quirúrgico que necesitamos allí. A las 13 hs cogí el autobús Segovia- Madrid, iba demasiado cargada con un paquete de 19 kg del material y mi mochila, a las 14 llegué a Madrid, me vinieron a buscar al intercambiador de Moncloa porque no podía con todo. Comimos en Madrid y a eso de las 17 hs llegábamos a la T4 de Barajas, en ese momento conocí a la mayor parte del equipo:

• Teresa, cirujana del 12 de Octubre y jefa de la misión.
• Ghada, cirujana del Hospital universitario de Getafe.
• Celia, enfermera del Hospital Sanitas de la Moraleja, Madrid.
• Miguel, anestesista del Hospital Clínico de Madrid
• Y yo, Sandra, cirujana del Hospital General de Segovia.

Envolvimos los 8 paquetes para facturar (2 x persona) en una de las máquinas de la T4, facturamos y directos a las puertas. Nos despedimos de los familiares que habían venido a despedirnos, pasamos los controles de seguridad y cogimos el “metro” a la T4S, allí nos esperaba otra de los componentes del grupo que venía desde Santander:

• Sonia, anestesista en el Hospital Universitario de Valdecilla, Santander.

Nuestro avión dirección Casablanca salió con algo de retraso, a las 20 hs hacíamos cola para embarcar y nos dábamos cuenta de que no traíamos adaptadores para los enchufes, así que Sonia y yo nos pegamos una carrerita hasta las tiendas del Dutty Free para comprar 4 rápidamente. Una hora y 40 minutos más tarde llegábamos a Casablanca, allí conocíamos al último integrante del equipo:

• Francesco, cirujano italiano.

8- octubre – 2016 Casablanca- Lagos- Eruwa

Estuvimos hasta la 1 de trasbordo, tomamos café, no conectamos a internet y ya nos fuimos introduciendo poco a poco en la cultura africana, sobre todo viendo los estilismos de los pasajeros que compartían espera con nosotros. El vuelo de Casablanca a Lagos duró 4 hs y media, algunos conseguimos dormir un poco a pesar del jaleo.

A las 5 y algo llegamos al aeropuerto, pasamos extranjería sin problemas y el control de registro de vacuna de la Fiebre Amarilla (no es de vacunación obligatoria pero ellos te lo exigen). El siguiente paso era de los más difíciles, coger los paquetes con el material y que no nos los quisieran abrir o quitar. Recogimos el material, para poder moverlo necesitábamos un carrito y para coger ese carrito necesitamos cambiar Euros en Nairas ( el cambio era 1€ = 507 n, aunque parezca mentira, ese fue el mejor cambio que tuvimos en todo el viaje, en unos días llegó a bajar a 1€ = 215n). Una vez que teníamos todo colocado, nos tocaba pasar por ADUANAS. Intentaron complicarnos la existencia con ver qué era lo que llevábamos en los paquetes, pero Teresa venía preparada con un papel con muchos sellos, la dirección del Hospital al que íbamos…se puso seria y tajante y no nos dijeron ni mú….salimos del aeropuerto sin problemas.

Los alrededores del aeropuerto es una zona de mucho bullicio, mucho intercambio de gente, mucho movimiento, mucho ruido….estaba lloviendo y al poco tiempo llegó el hermano mayor de la familia al que pertenece el Hospital donde íbamos a trabajar. Nos metieron los paquetes con el material y las mochilas en una furgoneta. Pronto nos dimos cuenta de que estábamos escoltados por tres nigerianos uniformados con metralleta….escolta que no se separó de nosotros durante los 7 días de misión.

El camino hacia Eruwa fue complicado, 3 hs en una furgoneta, con los bultos en la parte de atrás, casi sin haber dormido nada, con la carretera/ camino en un pésimo estado debido a que había estado lloviendo durante los días anteriores y estaba llena de baches y grandes balsas que parecían auténticas piscinas de lodo, coches estropeados en los andenes y motocicletas ruidosas por todos los sitios: BIENVENIDO A ÁFRICA!!! En un coche, justo detrás de nosotros, nos seguían nuestros escoltas. Llegamos a Eruwa, fuimos directos a nuestro “hotel”: Hotel Plural, (5 € /persona/noche) que para ser africano no estaba nada mal: la luz se iba de vez en cuando, con agua fría (si pedías agua caliente te traían una tetera con agua hirviendo que mezclabas con agua fría en un barreño y te duchabas con cubitos….no os lo vais a creer, pero una ducha de esas después de un día duro de trabajo sabe a auténtica gloria). Nos repartimos por las habitaciones: Ghada y Celia en una doble, Sonia y Sandra en otra y el resto en individuales. Nos dimos una ducha rápida y a desayunar.

Nos llevaron a casa de Tinu, la viuda del antiguo cirujano propietario del Hospital a donde fuimos a trabajar, estaba muy agradecida de nuestra presencia allí. A eso de las 12 estábamos comiendo un buen desayuno y reponiéndonos de un largo viaje.

Fuimos al Hospital: Awojobi Clinic Eruwa, un hospital africano que constaba de múltiples pabellones adecuados para diferentes funciones: hospitalización, historias clínicas, radiología, análisis, anatomía patológica, quirófanos….(no os imaginéis las cosas como en España, todo muy rudimentario y a pequeña escala). El último sitio del recorrido fue nuestro maravilloso quirófano, deshicimos los paquetes de material, colocamos todo un poco y como ya había pacientes por ahí….pues nos pusimos a operar, que es lo que sabemos hacer y a lo que habíamos venido. Esa tarde del triaje salieron 5 pacientes a los que operamos. A las  18 hs, casi ya sin luz y muertos del viaje y de toda la tarde de trabajo volvimos a casa de Tinu donde hicimos una especia de merienda-cena. Ese día nos fue imposible encontrar wifi, así ique llamamos rápido a casa para confirmar que estábamos bien.

Coincidió que en nuestro hotel había un bar bastante animado, lo que nos obligó a implantar la costumbre de tomar unas cerves y charlar antes de irnos a dormir.

 

9 al 13- octubre -2016 Eruwa

Nuestra rutina diaria consistía en lo siguiente, nos levantábamos sobre las 6,30-6,45 para prepararnos, porque teníamos que ir andando hasta la casa de Tinu, un camino tranquilo de unos 10 minutos por la selva, en los que siempre íbamos acompañados por nuestros hombres de seguridad. Desayunábamos en casa de Tinu, solía ser un desayuno abundante: café y leche en polvo, tortilla, cereales, tostadas…había que empezar bien la mañana. De ahí íbamos al hospital, que está justo en frente y empezábamos a trabajar: En lo que Teresa solía triar los pacientes que llegaban, los demás nos encargábamos de preparar el quirófano e ir empezando a operar a los primeros del día. Por la mañana sacábamos mucho más partido al quirófano, ya que por la tarde anochecía muy pronto (18hs). El proceso era el siguiente: Teresa triaba los pacientes y se iba haciendo un listado de las intervenciones del día (Parte quirúrgico), los cirujanos íbamos decidiendo a cual operábamos y con quien (normalmente con algún cirujano local, en esta misión nos hemos encontrado con personal muy dispuesto, los que han aprendido mucho: hernioplástias, anestesia raquídea, vías….), el paciente seleccionado pasaba al quirófano y Miguel o Sonia se encargaban de anestesiarlos (Raquídea), Celia preparaba material y a operar.

Normalmente, los pacientes operados por la mañana se solían ir de alta por la tarde-noche y los últimos se quedaban a pasar una noche en el hospital, al día siguiente se les revisaba y se decidía el alta.

Entre operación y operación solíamos tomar algo o salíamos a dar una vuelta por los alrededores del quirófano para interactuar con la gente y conocer un poco su forma de vida…cuando hablábamos con ellos nos dábamos cuenta del gran abismo entre nuestras culturas.

 

A las 14 hs, Tinu nos traía la comida a una pequeña sala al lado del quirófano, para comer rápido y poder seguir antes de que el sol cayera. Por la mañana podíamos hacer 8-9 procesos quirúrgicos, por la tarde 3-4. Sobre las 6-7 volvíamos a casa a cenar y luego al Hotel, a rematar el día con unas buenas Cervezas. Era gracioso ver como estaban ya preparados a que llegáramos para servírnoslas.

El día 12 de octubre fuimos recibidos por el Rey de la Región en su palacio (no era nada de lo que te puedas imaginar, muy austero) y allí tuvimos el encuentro. Nos dio las gracias por la ayuda que aportamos a su gente. La situación fue curiosa porque sus costumbres y las nuestras son muy diferentes y hubo algún malentendido con las reverencias, aunque quedó en una mera anécdota. Nos hicimos las fotos de rigor y nos invitaron a cacahuetes y Malta.

Los días fueron pasando y sin darnos cuenta llegó la hora de volver a casa. Satisfechos por los pacientes operados (alguno de ellos habían venido desde la propio ciudad de Lagos) y contentos por toda la formación que habíamos impartido a los médicos locales….sólo espero que algún día puedan poner en práctica todos los conocimientos que en tan sólo 7 días fuímos capaces de enseñarles. Fueron operados 68 pacientes con un total de 80 procesos quirúrgicos, todos ellos con patología de la pared abdominal (hernias inguinales, crurales, bilaterales y eventraciones).

14- octubre- 2016 Eruwa- Lagos

Era el último día, lo único que nos quedaba era ver a los pacientes operados del día anterior y recoger. Nos levantamos un poco más tarde, desayunamos relajadamente y fuimos al Hospital, dimos de alta a los pacientes operados el día anterior y recogimos el material. La mayor parte del material que llevamos lo dejamos allí ordenado e hicimos un inventario del mismo para que las próximas expediciones sepan con que material cuentan allí y embalamos el material que volvía de nuevo a España (los bisturís eléctrico que tenían que viajar en breve con la expedición de Camerún). Nos despedimos de todo el personal que compartió con nosotros todas nuestras largas jornadas de trabajo, previa realización de mil fotos con todos ellos, incluida una foto de todo el equipo en la puesta del Hospital. *Una especial mención a nuestros Stephen y Emmanuel, dos “enfermeros” muy dispuesto que nos ayudaron mucho.

Fuimos al Hotel a recoger las mochilas y tras despedirnos de Tinu comenzamos la aventura hacia Lagos. Íbamos todo el equipo, el conductor y tres hombres de seguridad con nosotros en una furgoneta, el viaje era lento debido al estado de la calzada/camino y a la locura de conducción del país, menuda experiencia el ver el mundo real al otro lado del cristal de la ventanilla…sensación amarga la de ver la situación en la que vive la población de uno de los países con mayor número de recursos naturales del mundo!!!

El viaje iba como esperábamos hasta que a la llegada a Lagos la furgoneta pinchó en una de las zonas más peligrosas, en ese momento dimos gracias de llevar con nosotros a los hombres de seguridad. Pararon el tráfico en la autopista, se pusieron uno delante, otros detrás de nosotros y otro en la mediana. El conductor tardó poco en cambiar la rueda y reanudamos el viaje, menudo susto!!! Un poco más adelante llegamos a encontrarnos un cadáver en la calzada. Lagos es la segunda ciudad más poblada de África, con más de 13 millones de habitantes. Yo la defino como el infierno en vida, sin duda la peor ciudad que he visitado. Insegura, sucia, peligrosa, inhumana…Imagínate un suburbio de 13 millones de personas!!! Nunca había olido la podredumbre en toda una ciudad…y os aseguro que se palpa en el ambiente!!!

 

A las 16 hs llegamos al Ibis International Airport (48 €/persona), un remanso de paz en un entorno hostil, que descanso!!! Vimos la carta del restaurante y nos volvimos locos!!! Subimos cada uno a su habitación….en tan sólo una semana como valoramos la ducha, la cama limpia, el agua, la limpieza….dejamos las mochilas y rápido bajamos a comer-cenar, tardaron en servirnos, pero daba igual, por fin un poco de comida europea…la pasta y las hamburguesas nos supieron a gloria!!! A las 18 hs terminamos de comer, nos tomamos unas copas en la terraza de la piscina, había que mucho que celebrar: MISIÓN CUMPLIDA! A las 21 hs fuimos a dormir, todo teníamos ganas de sábanas limpias!!!

 

15- octubre-2016 Lagos- Casablanca- Madrid

A las 4 quedamos en la recepción, dos taxis nos llevaron hasta la terminal del aeropuerto de Lagos, facturamos el material, pasamos el control de visados y el de seguridad. A las 6,30 despegábamos en dirección Casablanca, cuatro hs y media después llegamos y de nuevo controles de seguridad y de maletas de mano. Nos tomos unos cafés con dulces o bocadillo durante el trasbordo para hacer tiempo, ya que nuestro vuelos hacia Madrid salía a las 14 hs. El vuelo hacia Madrid pasó rápido, llegamos al aeropuerto, había que despedirse del equipo, fueron pocos días pero sin duda, son experiencias que unen!!!

 

CONSEJOS:

• Sin duda alguna, la inseguridad de Nigeria no hace recomendable la visita al país. Aunque la zona peligrosa (terrorista) está en el norte, la zona sur no queda exenta de peligro. No me gustó la sensación de tener que ser escoltada continuamente.
• Si te planteas hacer algún tipo de voluntariado plantéate los riesgos que estás dispuesto a asumir: malaria, VIH, terrorismo…
• A pesar de todo, fue una experiencia increíble, me traigo la mirada de agradecimiento de cada uno de los pacientes que operamos y el gran equipo profesional y humano que conocí, con el cual espero repetir.