Llevaba tiempo queriendo visitar Grecia, ansiaba por conocer Meteora, ver la acrópolis y perderme en sus islas. Quería pasear entre pueblos blancos con cúpulas azules y comer queso feta y gyros hasta reventar.
Tenía 12 días para diseñar una ruta y ver un poquito de todo. Lo tenía claro aunque tuve que modificarla un poco, me acababa de enterar que estaba embarazada.